31 enero 2008

De puertas abiertas.

Por mucho, este año ha comenzado como nunca lo hubiera imaginado.

De pronto me encuentro con que los próximos diez años tendré un futuro endeudado, pero eso sí, siendo ya dueño y señor de una casita compuesta por dos recámaras, baño, cocina y sala-comedor.

Estoy como un niño con juguete nuevo.

Contraté ya los servicios de agua y energía eléctrica y espero comenzar a levantar bardas, tengo planes para que se le instale un barandal metálico que haga juego con las rejas que ya posee.

Deseo comenzar a delinear un pequeño jardín con tulipanes (una de mis flores favoritas), tréboles y dientes de león; cierta esquina se encuentra ya reservada para un árbol de manzanas amarillas y al fondo sé que lucirá bien una parra que dé moradas uvas, también sembraré en el verano algunas semillas de calabaza para que se me alfombre de verde el marrón patio, aún no tengo bien decidido si plantar una mora al frente de mi casa (ya saben en franca alusión a mi primer apellido).

El cancel del baño y el par de armarios en ambas recámaras, siguen en la lista de espera, junto con el pasador de la puerta del patio, el teléfono y un sinnúmero de muebles que poco a poco empezaré a comprar, vendrá luego el sellado de mi casa para evitar que se cuele el frío viento al interior durante el crudo invierno.

Realizar todo lo que tengo previsto tal vez me lleve un año o quizá un poco más, pero sepan ustedes que si algún día deciden viajar para esta tierra, aquí cuentan desde ya con una morada que los recibirá con las puertas abiertas.


NaCl-U-2


Remo
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17 enero 2008

Sin aliento...

Sí, así me quedé ayer al escucharte, totalmente sin aliento...

Hace cuatro años cuando te ví cruzar por aquella delgada línea me dejaste igual.

Lo recuerdo perfecto, era una cálida tarde de verano, y justo interrumpí mis alimentos para verte.

No tienes idea de lo que removiste en mi alma.

Los dientes apretados, mis dedos cruzados, la piel chinita, y el corazón que de lo loco quería saltárseme del pecho.

Esa tarde grité tu nombre, tu victoria fue mía, y bendije tu nombre.

Yo te ví tan de cerca y tan lejos a un tiempo...

Seguro estoy que percibiste en el aire mi vibra.

Ese día lejano me motivaste a seguir adelante, me enseñaste que el que quiere puede y quizá eso fue lo que me dio el último empujón para apreciar el terminar con la lengua de fuera.

En octubre estuve a nada de verte, de estrechar tu mano, de tomarme una foto contigo, porque debes saber (aunque nunca leerás esto), que no siento por tí un amor carnal, no es la pasión que un hombre siente por una mujer lo que me anima a escribir esto, sino el profundo respeto con el que se venera a una imagen sagrada.

Quizá nunca más sabré de tí, pero ni falta que hace, la lección de dignidad que ayer me has dado no hace sino convertirte en leyenda.

Nunca serás olvidada.

Bienvenida a la eternidad, Ana Gabriela Guevara.


NaCl-U-2


Remo.

07 enero 2008

¡Hola, soy yo!

(Tercera parte).

- ¡Caramba!, que te has tardado hoy más de lo debido…

- Lo siento sinceramente, pero estoy aquí, recuerda el viejo dicho: “Más vale tarde que nunca”.

- Cierto, muy cierto.

- Hoy quiero darte un abrazo y un beso virtual, y en tu segundo aniversario dejar bien en claro que has sido más que valiosa, ¿quién lo fuera a decir, ya tienes 730 días.

- Gracias. Te agradezco tu efusividad.

- Espera cambios importantes para este año, sólo espéralos con calma y ya te encargarás de divulgarlos con singular alegría.

- Esperaré, como una madre espera a su bebé...

- ¡¡¡Feliz cumpleaños!!! Bitácora mía.

- Gracias.


NaCl-U-2


Remo.

02 enero 2008

Decreto de año nuevo II.

Habiéndome el tiempo apremiado hoy tengo a bien reordenar mi mundo y efectuar el siguiente decreto:

1.- Que la razón y la consciencia que habitan en mi cima sean despejadas de rocas cuyo contenido es la ignorancia, para que el rayo incandescente que emite la Verdad Suprema llegue hasta ellas bañándolas de luz y por completo.

2.- Ordeno con firmeza que la voluntad comparezca en mi socorro ante las trampas que le tiende la pereza y que la constancia finque hacendad ahí donde la inconsistencia ejecutaba sus malos actos de presencia.

3.- Mando primero que la fuerza sin demora refuerce mis tobillos, que la resistencia se aloje entre mis muslos y que la velocidad sea como una sola con las plantas de mis pies, y que las tres en conjunto vayan acorde a mis latidos y a las brazadas que surgen de mis hombros.

Desterraré de una sola vez y por completo los siguientes doce meses cualquier mínima huella de alcohol.

Ordeno con severidad que se abran las puertas de mi reino para beneficio de mi espíritu, de mi mente y de mi cuerpo.

Yo, el rey de este mar de sueños.


NaCl-U-2


Remo.