Sueño guajiro.

Hoy tengo poco o casi nada de tiempo para hacer algo que siempre he amado y que de verdad me complace mucho.

Vamos, que el escribir me llena de una extraña paz, me permite evadirme y a a veces no ser yo, de disertar sobre agudos temas y a veces hasta de reflexionar.

Cuando ello comienza, una extraña metamorfosis se apodera de mi y transforma mi cuerpo, mi mente, mi espíritu y mi entorno, no, no piense usted que uso drogas, no las necesito para vivir en colores y a calores más intensos.

He de confesarlo, creo que mucha de la salud mental de la que actualmente dispongo se debe en gran parte al psicólogo en que se ha convertido este blog.

Después de mucho pensarlo y con más de tres meses de "pulir" algunos de mis cuentos, (que ustedes aquí han padecido o disfrutado, según sea el caso), decidí ingresar a un concurso.

No hay mucho que decir, ya que ustedes amables lectores han sido testigos de las letras que he vertido en relatos ficticios.

El resultado lo darán a conocer en el mes de junio, y aunque no me hago las grandes esperanzas, puesto que compito con escritores profesionales, me queda el consuelo de que al menos no me quedé con las ganas de hacerlo, y es tan grande la cosquilla interna que en mí se ha despertado, que ya trabajo en otros dos tipos de cuentos (al menos mentalmente).

Un gran abrazo para todos ustedes.


NaCl-U-2


Remo.